El yerno del rey Juan Carlos I de España, Iñaki Urdangarín, ha sido sancionado por la corte de justicia española por la malversación de fondos que realizó en años anteriores a nombre de su empresa privada, Instituto Nóos. El juez José Castro, que ha seguido su caso desde 2009 y que estalló en los medios mundiales en 2011, le puso una fianza nada menos que de 8.1 millones de euros (poco más de 10 millones de dólares) que debe pagar en el transcurso de cinco días a partir de mañana.
El Duque de Palma deberá dividirse este monto con su socio en el Instituto Noós, Diego Torres, con instrucciones de 'ponerse de acuerdo para pagarlo' sin especificar cuánto deberá poner cada uno. Como parte de su defensa, Torres amenazó con mostrar evidencias de que la Infanta Cristina fue parte de los negocios, luego de que ella quedara exonerada el año pasado.
Por su parte, el abogado de Urdangarín, Mario Pascual se pronunció en contra de esta fianza y negó una vez más que éste haya incurrido en corrupción para enriquecerse ilícitamente a costa de negocios con la Generalitat Valencia y del Gobierno de Baleares, provincias donde organizó cinco eventos deportivos y turísticos entre 2003 y 2006, además de un polideportivo llamado Palma Arena, que tuvo un costo exacerbado y que fue cabalmente lo que llamó la atención del juez Castro en primer lugar.
La fianza de 8 millones y cien mil euros fue sustentado por 500 folios de investigación y evidencias del juez Castro y quedó como fianza para el cargo de responsabilidad civil por presunto daño patrimonial causado a las arcas públicas.
Urdangarín y Torres tienen cinco días a partir de hoy para cubrir esa cuota o serán embargados todos sus bienes y de no cubrirlo por esa vía, entonces irían a prisión.
El Rey, la Infanta Cristina e Iñaki Urdangarín en 2009:
Diego Torres, el socio de Urdangarín, amenaza con involucrar a la Infanta Cristina:
